[2. La respuesta a Job]
"Sólo Dios puede responder. No lo ha hecho de modo definitivo. No lo ha hecho de forma que la respuesta pueda exponerse a la vista y pronunciarse. Pero tampoco ha callado del todo. Por supuesto, falta su última palabra. Comienza solamente con la resurrección de Jesús. Y siempre ocurre de manera que no sólo el entendimiento humano, sino incluso el corazón la solicita. Esto comienza ya en Job: Dios interviene en el debate. No se pone del lado de sus defensores. Rechaza como blasfema aquella apología que le convierte en ejecutor de una justicia conmutativa minuciosamente contabilizada.
Joseph Ratzinger
- Joseph Ratzinger (*1927), El Dios de los cristianos. Meditaciones, Sígueme, Salamanca 2005, pp. 52-53.
- Marc Chagall (1887-1985), Job en prières (litografía, 1960), Musée national Marc Chagall, Niza, Francia.