domingo, 23 de diciembre de 2012

Ungaretti - Veglia (1915)


Veglia
Cima Quattro il 23 dicembre 1915

Vela
Cima Cuatro el 23 de diciembre de 1915

Un'intera nottata
buttato vicino
a un compagno
massacrato
con la sua bocca
digrignata
volta al plenilunio
con la congestione
delle sue mani
penetrata
nel mio silenzio
ho scritto
lettere piene d'amore

Non sono mai stato
tanto
attaccato alla vita

Una entera noche
echado junto
a un compañero
masacrado
con su boca
desencajada
vuelta al plenilunio
con la congestión
de sus manos
penetrada
en mi silencio
he escrito
cartas llenas de amor

No he estado nunca
tan
aferrado a la vida
Giuseppe Ungaretti (1888-1970)
L'Allegria (1931): Il porto sepolto
Giuseppe Ungaretti (1888-1970)
La Alegría (1931): El puerto sepultado



miércoles, 19 de septiembre de 2012

Prévert - Barbara (1946)


Barbara (1946)

Rappelle-toi Barbara
Il pleuvait sans cesse sur Brest ce jour-là
Et tu marchais souriante
Épanouie ravie ruisselante
Sous la pluie
Rappelle-toi Barbara
Il pleuvait sans cesse sur Brest
Et je t'ai croisée rue de Siam
Tu souriais
Et moi je souriais de même
Rappelle-toi Barbara
Toi que je ne connaissais pas
Toi qui ne me connaissais pas
Rappelle-toi
Rappelle-toi quand même ce jour-là
N'oublie pas
Un homme sous un porche s'abritait
Et il a crié ton nom
Barbara
Et tu as couru vers lui sous la pluie
Ruisselante ravie épanouie
Et tu t'es jetée dans ses bras
Rappelle-toi cela Barbara
Et ne m'en veux pas si je te tutoies
Je dis tu a tout ceux que j'aime
Même si je ne les ai vus qu'une seule fois
Je dis tu a tout ce qui s'aiment
Même si je ne les connais pas
Rappelle-toi Barbara
N'oublie pas
Cette pluie sage et heureuse
Sur ton visage heureux
Sur cette ville heureuse
Cette pluie sur la mer
Sur l'arsenal
Sur le bateau d'Ouessant
Oh Barbara
Quelle connerie la guerre
Qu'es-tu devenue maintenant
Sous cette pluie de fer
De feu d'acier de sang
Et celui qui te serrait dans ses bras
Amoureusement
Est-il mort disparu ou bien encore vivant
Oh Barbara
Il pleut sans cesse sur Brest
Comme il pleuvait avant
Mais ce n'est plus pareil et tout est abîmé
C'est une pluie de deuil terrible et désolée
Ce n'est même plus l'orage
De fer d'acier de sang
Tout simplement des nuages
Qui crèvent comme des chiens
Des chiens qui disparaissent
Au fil de l'eau sur Brest
Et vont pourrir au loin
Au loin très loin de Brest
Dont il ne reste rien.

Jacques Prévert, en Paroles (1946)


  • Jacques Prévert, Paroles (1946).

Prévert - Bárbara (1946)


Bárbara (1946)

Recuerda Bárbara
Llovía sin parar sobre Brest aquel día
Y tú caminabas sonriente
Radiante dichosa empapada
Bajo la lluvia
Recuerda Bárbara
Llovía sin parar sobre Brest
Y me crucé contigo en la calle de Siam
Tú sonreías
Y yo sonreía también
Recuerda Bárbara
Tú a quien yo no conocía
Tú que no me conocías
Recuerda
Recuerda al menos aquel día
No olvides
Un hombre se cobijaba en un soportal
Y gritó tu nombre
Bárbara
Y corriste hacia él bajo la lluvia
Empapada dichosa radiante
Y te arrojaste en sus brazos
Recuérdalo Bárbara
Y no te ofendas si te tuteo
Yo trato de tú a todos los que amo
Aunque les haya visto una sola vez
Yo trato de tú a todos los que se aman
Aunque no les conozca
Recuerda Bárbara
No olvides
esa lluvia serena y feliz
Sobre tu rostro feliz
Sobre esa ciudad feliz
Esa lluvia sobre el mar
Sobre el arsenal
Sobre el barco de Ouessant
Oh Bárbara
Qué putada la guerra
Qué habrá sido de ti ahora
Bajo esa lluvia de hierro
De fuego de acero de sangre
Y aquel que te estrechaba en sus brazos
Amorosamente
Estará muerto desaparecido o bien aún vivo
Oh Bárbara
Llueve sin parar sobre Brest
Como llovía entonces
Pero ya no es lo mismo
y todo se ha echado a perder
Es una lluvia de duelo terrible y desolada
Ni siquiera es la tempestad
De hierro de acero de sangre
Son simplemente nubes
Que revientan como perros
Perros que desaparecen
Con el agua sobre Brest
Y van a pudrirse lejos
Lejos muy lejos de Brest
De la que ya no queda nada.

Jacques Prévert, en Paroles (1946)


  • Jacques Prévert, Paroles (1946).

lunes, 27 de agosto de 2012

Ungaretti - San Martino del Carso (1916)


San Martino del Carso
Valloncello dell'Albero Isolato il 27 agosto 1916

Di queste case
non è rimasto
che qualche
brandello di muro

Di tanti
che mi corrispondevano
non è rimasto
neppure tanto

Ma nel cuore
nessuna croce manca

È il mio cuore
il paese più straziato

Giuseppe Ungaretti, in L'Allegria (1931): "Il porto sepolto"


San Martino del Carso
Valloncello dell'Albero Isolato el 27 de agosto de 1916

De estas casas
no ha quedado
más que algún
pedazo de muro

De tantos
a los que estaba unido
no ha quedado
ni siquiera tanto

Pero en el corazón
ninguna cruz falta

Mi corazón es
la aldea más devastada

Giuseppe Ungaretti, in L'Allegria (1931): "Il porto sepolto"



viernes, 24 de agosto de 2012

Benedetti - Son raras las veces que pienso en Dios


Sábado 24 de agosto

"Son raras las veces que pienso en Dios. Sin embargo, tengo un fondo religioso, un ansia de religión. Quisiera convencerme de que efectivamente poseo una definición de Dios, un concepto de Dios. Pero no poseo nada semejante. Son raras las veces en que pienso en Dios, sencillamente porque el problema me excede tan sobrada y soberanamente, que llega a provocarme una especie de pánico, una desbandada general de mi lucidez y de mis razones. «Dios es la Totalidad» dice a menudo Avellaneda. «Dios es la Esencia de todo» dice Aníbal, «lo que mantiene todo en equilibrio, en armonía, Dios es la Gran Coherencia». Soy capaz de entender una y otra definición, pero ni una ni otra son mi definición. Es probable que ellos estén en lo cierto, pero no es ése el Dios que yo necesito. Yo necesito un Dios con quien dialogar, un Dios en quien pueda buscar amparo, un Dios que me responda cuando lo interrogo, cuando lo ametrallo con mis dudas. Si Dios es la Totalidad, la Gran Coherencia, si Dios es solo la energía que mantiene vivo el Universo, si es algo tan inconmensurablemente infinito, ¿qué puede importarle de mí, un átomo malamente encaramado a un insignificante piojo de su Reino? No me importa ser un átomo del ultimo piojo de su Reino, pero me importa que Dios esté a mi alcance, me importa asirlo, no con mis manos, claro, ni siquiera con mi razonamiento. Me importa asirlo con mi corazón."

Mario Benedetti, La tregua (1960)



lunes, 20 de agosto de 2012

miércoles, 15 de agosto de 2012

Horacio - O fons Bandusiae



      O fons Bandusiae

O fons Bandusiae splendidior uitro,
dulci digne mero non sine floribus,
      cras donaberis haedo,
      cui frons turgida cornibus

primis et uenerem et proelia destinat.
Frustra: nam gelidos inficiet tibi
      rubro sanguine riuos
      lasciui suboles gregis.

Te flagrantis atrox hora Caniculae
nescit tangere, tu frigus amabile
      fessis uomere tauris
      praebes et pecori uago.

Fies nobilium tu quoque fontium
me dicente cauis impositam ilicem
      saxis, unde loquaces
      lymphae desiliunt tuae.

      Oh, fuente de Bandusia

¡Oh, fuente de Bandusia,
más clara que el cristal,
digna del dulce vino puro!
Mañana, y no sin flores,
te inmolaré un cabrito, cuya frente,
henchida ya por los primeros cuernos,
busca amor y pelea.
En vano, pues tus frescas aguas
teñirá con su sangre roja este retoño
de la alegre cabra.
No es capaz de alcanzarte
la hora implacable de la ardiente Canícula;
tú ofreces un frescor amable
a los bueyes cansados ya de arar
y a la manada errática.
Te contarás entre las fuentes célebres,
pues he cantado al roble que se yergue
sobre tus peñas huecas,
de donde brotan tus linfas parlanchinas.

Quintus Horatius Flaccus, Carmina, Liber III, Carmen XIII (23 a.C.).



jueves, 9 de agosto de 2012

Sachs - O die Schornsteine (1947)


O die Schornsteine (1947)

Und wenn diese meine Haut zerschlagen sein wird,
so werde ich ohne mein Fleisch Gott schauen.

Hiob

O die Schornsteine
Auf den sinnreich erdachten Wohnungen des Todes,
Als Israels Leib zog aufgelöst in Rauch
Durch die Luft -
Als Essenkehrer ihn ein Stern empfing
Der schwarz wurde
Oder war es ein Sonnenstrahl?

O die Schornsteine!
Freiheitswege für Jeremias und Hiobs Staub -
Wer erdachte euch und baute Stein auf Stein
Den Weg für Flüchtlinge aus Rauch?

O die Wohnungen des Todes,
Einladend hergerichtet
Für den Wirt des Hauses, der sonst Gast war -

O ihr Finger,
Die Eingangsschwelle legend
Wie ein Messer zwischen Leben und Tod -

O ihr Schornsteine,
O ihr Finger,
Und Israels Leib im Rauch durch die Luft!


Nelly Sachs, en In den Wohnungen des Todes (1947)



lunes, 23 de julio de 2012

Bauer - Ut i vida världen [En el ancho mundo] (1907) /
Hansson - Jag vill se himlen [Yo quiero ver el cielo] (2001)



Jag vill se himlen

Jag vill se himlen
dyrkas upp av sitt eget ljus
färdas baklänges se molnen
rotera ut över taken farfar farfar
jag färdas bakåt till din sjuksäng
du ligger stilla utsträckt och ser på mig
dina ögon är grumliga som vårvatten
och farmor i dörröppningen
ser bekymrad ut men lugn och glad
att du är glad i mig


Yo quiero ver el cielo

Yo quiero ver el cielo
siendo forzado por su propia luz
transportado hacia atrás ver las nubes
rotar sobre el pensamiento abuelo abuelo
me transporto hacia atrás a tu cama de enfermo
estás quieto estirado y me miras
tus ojos están turbios como agua de primavera
y la abuela en la puerta
parece preocupada pero calma y alegre
por tu alegría por mí

Pär Hansson (1970), de Familjekista, 2001.


  • John Bauer (1882-1918), "Ut i vida världen" / "En el ancho mundo", en Bland Tomtar och Troll / Entre los duendes y los trolls (1907).
  • Pär Hansson (1970), de Familjekista, Ed. Norstedts, 2001 / Traducción: Roberto Mascaró.

jueves, 21 de junio de 2012

Buson - Haikú: Se va la primavera


ゆく春や おもたき琵琶の 抱心
Yukuharu ya / omotaki biha no / daki gokoro


Se va la primavera

Sostener el laúd

qué pesado resulta

















Yosa Buson (1716-1784)




domingo, 17 de junio de 2012

Eliot - The Hollow Men (1925)


Lectura del poema por T.S. Eliot

Lectura del poema por T.S. Eliot
con música de Vincent Persichetti*


 Lectura del poema por Robert Speaight 












The Hollow Men
1925
Mistah Kurtz — he dead.




The Hollow Men

A penny for the Old Guy


I

We are the hollow men
We are the stuffed men
Leaning together
Headpiece filled with straw. Alas!
Our dried voices, when
We whisper together
Are quiet and meaningless
As wind in dry grass
Or rats' feet over broken glass
In our dry cellar

Shape without form, shade without colour,
Paralysed force, gesture without motion;

Those who have crossed
With direct eyes, to death's other Kingdom
Remember us — if at all — not as lost
Violent souls, but only
As the hollow men
The stuffed men.


II

Eyes I dare not meet in dreams
In death's dream kingdom
These do not appear:
There, the eyes are
Sunlight on a broken column
There, is a tree swinging
And voices are
In the wind's singing
More distant and more solemn
Than a fading star.

Let me be no nearer
In death's dream kingdom
Let me also wear
Such deliberate disguises
Rat's coat, crowskin, crossed staves
In a field
Behaving as the wind behaves
No nearer—

Not that final meeting
In the twilight kingdom


III

This is the dead land
This is cactus land
Here the stone images
Are raised, here they receive
The supplication of a dead man's hand
Under the twinkle of a fading star.

Is it like this
In death's other kingdom
Waking alone
At the hour when we are
Trembling with tenderness
Lips that would kiss
Form prayers to broken stone.


IV

The eyes are not here
There are no eyes here
In this valley of dying stars
In this hollow valley
This broken jaw of our lost kingdoms

In this last of meeting places
We grope together
And avoid speech
Gathered on this beach of the tumid river

Sightless, unless
The eyes reappear
As the perpetual star
Multifoliate rose
Of death's twilight kingdom
The hope only
Of empty men.


V

Here we go round the prickly pear
Prickly pear prickly pear
Here we go round the prickly pear
At five o'clock in the morning.

Between the idea
And the reality
Between the motion
And the act
Falls the Shadow
For Thine is the Kingdom        

Between the conception
And the creation
Between the emotion
And the response
Falls the Shadow
Life is very long        

Between the desire
And the spasm
Between the potency
And the existence
Between the essence
And the descent
Falls the Shadow
For Thine is the Kingdom        

For Thine is
Life is
For Thine is the

This is the way the world ends
This is the way the world ends
This is the way the world ends
Not with a bang but a whimper.







T.S. Eliot, The Hollow Men (1925), en Poems: 1909-1925
[Traducción] [Lectura de Marlon Brando en Apocalypse Now]


* Fragmento de The Hollow Men, para trompeta y orquesta de cuerda, Op. 25 (1944).



Eliot - Los hombres huecos (1925)


Lectura del poema por T.S. Eliot

Lectura del poema por T.S. Eliot
con música de Vincent Persichetti*


 Lectura del poema por Robert Speaight 












Los hombres huecos
1925
Mistah Kurtz — ha muerto.




Los hombres huecos

Un penique para el viejo Guy


I

Somos los hombres huecos
somos los hombres rellenos
apoyados uno en otro
la mollera llena de paja. ¡Ay!
Nuestras voces resecas, cuando
susurramos juntos
son tranquilas y sin significado
como viento en hierba seca
o patas de ratas sobre cristal roto
en la bodega seca de nuestras provisiones

Figura sin forma, sombra sin color,
fuerza paralizada, gesto sin movimiento;

los que han cruzado
con los ojos derechos, al otro Reino de la muerte
nos recuerdan —si es que nos recuerdan— no como
perdidas almas violentas, sino sólo
como los hombres huecos
los hombres rellenados.


II

Ojos que no me atrevo a encontrar en sueños
en el reino del sueño de la muerte
esos ojos no aparecen:
ahí, los ojos son
luz del sol en una columna rota
ahí, hay un árbol meciéndose
y las voces son
el canto del viento
más lejanas y más solemnes
que una estrella que se apaga.

No me acerque yo más
en el reino del sueño de la muerte
revístame yo también
de tan deliberados disfraces
pelaje de rata, piel de cuervo, palos cruzados
en un campo
comportándome igual que el viento
sin acercarme más...

No ese encuentro final
en el reino crepuscular.


III

Esta es la tierra muerta
esta es la tierra del cactus
aquí se elevan las imágenes
de piedra, aquí reciben
la súplica de la mano de un muerto
bajo el titilar de una estrella que se apaga.

Así es
en el otro reino de la muerte
despertar solo
a la hora en que
temblamos de ternura
labios que querrían besar
forman oraciones de piedra rota.


IV

Loa ojos no están aquí
no hay ojos aquí
en este valle de estrellas que mueren
en este valle hueco
la quijada rota de nuestros reinos perdidos

en este, el último de los lugares del encuentro
vamos a tientas juntos
y evitamos hablar
reunidos en esta playa del rio hinchado

sin vista, a no ser que
reaparezcan los ojos
como la estrella perpetua
rosa multifoliada
del crepuscular reino de la muerte
la esperanza solamente
de hombres vacíos.


V

Al corro del higo chumbo
al higo chumbo higo chumbo
al corro del higo chumbo
a las cinco de la mañana.

Entre la idea
y la realidad
entre el movimiento
y el acto
cae la Sombra
porque Tuyo es el Reino        

Entre la concepción
y la creación
entre la emoción
y la respuesta
cae la Sombra
la vida es muy larga        

Entre el deseo
y el espasmo
entre la potencia
y la existencia
entre la esencia
y el descenso
cae la Sombra
pues Tuyo es el Reino        

pues Tuyo es
la Vida es
pues Tuyo es el

Así es como acaba el mundo
Así es como acaba el mundo
Así es como acaba el mundo
No con una estallido sino con un gimoteo.







T.S. Eliot, Los hombres huecos (1925), en Poesías: 1909-1925
[Original inglés] [Lectura de Marlon Brando en Apocalypse Now]


* Fragmento de The Hollow Men, para trompeta y orquesta de cuerda, Op. 25 (1944).



Eliot - The Hollow Men (1925) [lectura de Brando
en "Apocalypse Now" (Coppola, 1979)




Otra versión





viernes, 15 de junio de 2012

Διὰ τὴν πολλὴν ἀγάπην / Propter nimiam caritatem suam


Ὁ δὲ Θεὸς πλούσιος ὢν ἐν ἐλέει, διὰ τὴν πολλὴν ἀγάπην αὐτοῦ ἣν ἠγάπησεν ἡμᾶς, καὶ ὄντας ἡμᾶς νεκροὺς τοῖς παραπτώμασιν συνεζωοποίησεν τῷ Χριστῷ —χάριτι ἐστε σεσῳσμένοι— καὶ συνήγειρεν καὶ συνεκάθισεν ἐν τοῖς ἐπουρανίοις ἐν Χριστῷ Ἰησοῦ, ἵνα ἐνδείξηται ἐν τοῖς αἰῶσιν τοῖς ἐπερχομένοις τὸ ὑπερβάλλον πλοῦτος τῆς χάριτος αὐτοῦ ἐν χρηστότητι ἐφ’ ἡμᾶς ἐν Χριστῷ Ἰησοῦ.

Deus,
qui dives est
in misericordia,
propter nimiam
caritatem suam,
qua dilexit nos,
et cum essemus
mortui peccatis,
convivificavit nos
Christo
—gratia estis salvati—
et conresuscitavit
et consedere fecit
in caelestibus
in Christo Iesu,
ut ostenderet
in saeculis
supervenientibus
abundantes divitias
gratiae suae
in bonitate
super nos
in Christo Iesu.


Dios, rico en misericordia, por el gran amor con que nos amó, estando nosotros muertos por los pecados, nos ha hecho revivir con Cristo —estáis salvados por pura gracia—; nos ha resucitado con Cristo Jesús, nos ha sentado en el cielo con él, para revelar en los tiempos venideros la inmensa riqueza de su gracia, mediante su bondad para con nosotros en Cristo Jesús.
San Pablo a los Efesios 2,4-7.



jueves, 7 de junio de 2012

Ratzinger - Compañero de nuestra vida


¿Qué nación hay tan grande
que tenga dioses tan cercanos a ella
como lo está de nosotros el Señor nuestro Dios
siempre que le invocamos?


Deuteronomio 4,7



"Dios en la Eucaristía llega a ser realmente compañero de nuestra vida. Se hizo carne, para poder ser pan. Se ha introducido en el «fruto de la tierra y del trabajo del hombre»; se ha puesto en nuestras manos y se ha introducido en nuestro corazón. Dios no es el gran desconocido, al que sólo podemos confusamente vislumbrar. Nosotros no hemos de temer, como los gentiles, que él tal vez sea caprichoso o cruel, demasiado grande o demasiado lejano para escuchar a los hombres. Él está ahí y nosotros sabemos siempre dónde podemos encontrarlo, dónde se deja encontrar y nos espera. Hoy nos debe penetrar de nuevo en el alma esto: Dios está cerca de nosotros. Dios nos conoce. Dios nos espera en Jesucristo, presente en el santo sacramento. ¡No le hagamos esperar en vano! No pasemos de largo ante lo más importante y grandioso que se nos ha ofrecido en nuestra vida, debido a nuestra distracción y a nuestra pereza. Con esta lectura de hoy hemos de dejarnos recordar de nuevo el misterio admirable que esconden los muros de nuestros templos. No pasemos descuidadamente de largo por ellos. Tomémonos también algún tiempo durante la semana, entremos al pasar y permanezcamos un momento ante el Señor, que está tan cerca. Nuestras iglesias no deberían ser durante el día casas muertas, que están ahí, vacías y aparentemente sin ninguna finalidad. Siempre sale de dentro de ellas una invitación de Jesucristo. Siempre habita en ellas esa santa vecindad nuestra, que siempre nos está llamando e invitando. Lo más hermoso de las iglesias católicas es justamente que en ellas siempre hay liturgia, porque en ellas siempre permanece la presencia eucarística del Señor.

Y una segunda cosa: no olvidemos nunca que el domingo es el día del Señor. Y no es capricho de la Iglesia que reclame de nosotros la asistencia a la misa dominical; no se trata de una obligación impuesta desde fuera, sino que participar con el Señor de la reunión pascual, del misterio pascual, es el derecho regio de los cristianos. El Señor convirtió el primer día de la semana en su día, en el cual él viene hasta nosotros, pone la mesa para nosotros y nos invita a llegarnos a él. Del fragmento del Antiguo Testamento que hoy nos ocupa deducimos que los israelitas consideraron la cercanía de Dios no como una carga, sino como la razón de su orgullo y de su alegría. De hecho la reunión dominical con el Señor no es una carga, sino gracia, regalo, que ilumina toda la semana; y nos engañamos a nosotros mismos si nos privamos de ella."

Joseph Ratzinger



miércoles, 6 de junio de 2012

Ray Bradbury: In memoriam (1920-2012)


In memoriam († 05/06/2012)



"Libraries raised me. I don’t believe in colleges and universities. I believe in libraries because most students don’t have any money. When I graduated from high school, it was during the Depression and we had no money. I couldn’t go to college, so I went to the library three days a week for 10 years" (in Steinhauer, Jennifer [June 19, 2009]. "A Literary Legend Fights for a Local Library". The New York Times. Retrieved December 9, 2009).



► Leer Ray Bradbury, En una estación de buen tiempo.




domingo, 3 de junio de 2012

Ratzinger - Dios es trinitariamente uno




"En la oración de Jesús se ilumina el Padre, se reconoce a Jesús como Hijo y se ve una unidad tal, que es unidad trinitaria. De ahí que hacerse cristiano equivalga a participar en la oración de Jesús, a entrar en su pauta vital, es decir, en la pauta que traza su oración. Hacerse cristiano equivale a decir Padre juntamente con él, y por consiguiente a hacerse hijo de Dios, en la unidad del Espíritu que nos hace ser nosotros mismos y nos relaciona de ese modo con la unidad de Dios. Ser crisitano es mirar al mundo desde ese centro y, desde él, ser libre, esperanzado, decidido y alegre."

Joseph Ratzinger



jueves, 31 de mayo de 2012

Μεγαλύνει ἡ ψυχή μου τὸν Κύριον /
Magnificat anima mea Dominum



Magnificat anima mea Dominum,
et exultavit spiritus meus in Deo salutari meo,
quia respexit humilitatem ancillae suae.
Ecce enim ex hoc beatam me dicent
omnes generationes, quia fecit mihi magna
qui potens est, et sanctum nomen eius,
et misericordia eius
ad progenie in progenies timentibus eum.
Fecit potentiam in brachio suo,
dispersit superbos mente cordis sui,
deposuit potentes de sede,
et exaltavit humiles,
esurientes implevit bonis,
et divites dimisit inanes.
Suscepit Israel puerum suum
recordatus misericordiae suae,
sicut locutus est
ad patres nostros
Abraham et semini eius in saecula.
Proclama mi alma la grandeza del Señor,
y se alegra mi espíritu en Dios, mi Salvador;
porque ha puesto sus ojos
en la humildad de su esclava,
y por eso desde ahora
todas las generaciones
me llamarán bienaventurada,
porque el Poderoso
ha hecho obras grandes en mí:
su nombre es Santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.
Él hizo proezas con su brazo:
dispersó a los soberbios de corazón,
derribó del trono a los poderosos
y enalteció a los humildes,
a los hambrientos los colmó de bienes
y a los ricos los despidió vacíos.
Auxilió a Israel, su siervo,
acordándose de la misericordia
—como lo había prometido a nuestros padres—
en favor de Abraham
y su descendencia por siempre.

Vladimír Godár - Magnificat

[Ver en Youtube]
        Μεγαλύνει ἡ ψυχή μου τὸν Κύριον
καὶ ἠγαλλίασεν τὸ πνεῦμά μου ἐπὶ τῷ Θεῷ τῷ σωτῆρί μου,
ὅτι ἐπέβλεψεν ἐπὶ τὴν ταπείνωσιν τῆς δούλης αυτοῦ.
ἰδού γὰρ ἀπὸ τοῦ νῦν μακαριοῦσίν με πᾶσαι αἱ γενεαί,
ὅτι ἐποίησέν μοι μεγάλα ὁ δυνατός,
καὶ ἅγιον τὸ ὄνομα αὐτοῦ,
καὶ τὸ ἔλεος αὐτοῦ εἰς γενεὰς καὶ γενεὰς
τοῖς φοβουμένοις αυτόν.
Ἐποίησεν κράτος ἐν βραχίονι αὐτοῦ,
διεσκόρπισεν ὑπερηφάνους διανοίᾳ καρδίας αὐτῶν·
καθεῖλεν δυνάστας ἀπὸ θρόνων
καὶ ὕψωσεν ταπεινούς,
πεινῶντας ἐνέπλησεν ἀγαθῶν
καὶ πλουτοῦντας ἐξαπέστειλεν κενούς.
ἀντελάβετο Ἰσραὴλ παιδὸς αὐτοῦ,
μνησθῆναι ἐλέους,
καθὼς ἐλάλησεν πρὸς τοὺς πατέρας ἡμῶν
τῷ Αβραὰμ καὶ τῷ σπέρματι αὐτοῦ εἰς τὸν αἰῶνα.



domingo, 27 de mayo de 2012

Ratzinger - El fuego del Espíritu Santo




"El fuego quema y transforma. La fe es una lengua de fuego que nos quema, nos funde y transforma para que cada vez tenga más vigencia el hecho de que soy yo, pero ya no más yo [cfr. Gál 2,20]. Por supuesto, quien se encuentre hoy en día con el cristiano promedio tendrá que preguntarse dónde ha quedado la lengua de fuego. Lamentablemente, lo que sale de las lenguas cristianas es a menudo cualquier cosa menos fuego. Sabe más bien a agua estancada, apenas tibia, ni caliente ni fría. Ni nosotros queremos quemarnos ni quemar a otros, pero de ese modo nos mantenemos lejos del Espíritu Santo, y la fe cristiana decae al nivel de una cosmovisión de fabricación propia que procura en lo posible no dañar nada de nuestras comodidades y que se reserva la acritud de la protesta para los casos en que ésta apenas puede perturbarnos en nuestras costumbres. Por supuesto, si eludimos el fuego ardiente del Espíritu Santo, la condición de cristianos sólo se hará cómoda a primera vista. La comodidad del individuo es la incomodidad del conjunto. Cuando no nos exponemos más al fuego de Dios, las fricciones entre nosotros se vuelven insoportables y, como lo expresara Basilio, la Iglesia se ve desgarrada por el griterío de las facciones. Sólo cuando no tenemos la lengua de fuego ni el viento huracanado que trae consigo, la Iglesia se torna icono del Espíritu Santo. Y sólo entonces abre el mundo a la luz de Dios. La Iglesia comenzó cuando los discípulos se reunieron unánimes en el Cenáculo para orar. Así comienza siempre de nuevo. Implorando en oración el Espíritu Santo, tenemos que llamarla cada día de nuevo a la existencia."

Joseph Ratzinger



jueves, 24 de mayo de 2012

The Book of Kells - Madonna and Child /
Cú Chuimne Sapiens - Hymnum in laudem S. Mariæ

Turning darkness into light (III)


Cantemus in omni die concinnantes uarie
conclamantes Deo dignum ymnum Sancte Marie.
Bis per chorum hinc et inde conlaudemus Mariam
ut uox pulset omnem aurem per laudem uicariam.
Maria de tribu Iuda Summi mater Domini
oportunam dedit curam egrotanti homini.
Gabriel aduexit Verbum sinu prius Paterno
quod conceptum et susceptum in utero materno.
Hec est summa, hec est sancta uirgo uenerabilis,
que ex fide non recessit sed exstetit stabilis.
Huic matri nec inuenta ante nec post similis
nec de prole fuit plane humane originis.
Per mulierem et lignum mundus prius periit;
per mulieris uirtutem ad salutem rediit.
Maria mater miranda Patrem suum edidit
per quem aqua late lotus totus mundus credidit.
Hec concepit margaritam — non sunt uana somnia —
pro qua sani Christiani uendunt sua omnia.
Tunicam per totum textam Christi mater fecerat
que peracta Christi morte sorte statim steterat.
Induamus arma lucis loricam et galiam
ut simus Deo perfecti suscepti per Mariam.
Amen Amen adiuramus merita puerpere
ut non possit flamma pire nos dire decerpere.
Christi nomen inuocamus angelis sub testibus
ut fruamur et scribamur litteris celestibus.
Sancte Marie meritum
imploramus dignissimum.
ut mereamur solium
habitare altissimum.
Amen.

Cú Chuimne sapiens, Hymnum in laudem S. Mariæ (s. VIII)



lunes, 21 de mayo de 2012

von Bingen - El claror infinito

Turning darkness into light (II)


“Percibí que en el claror que he descrito había un claror mucho mayor e infinito. Traté de observarlo, pero el resplandor de su fulgor fue tan deslumbrante que no fui capaz de verlo bien ni tampoco ver nada de lo que en él se encontraba. Sin embargo pude entender que en él estaba toda la belleza de todos los adornos, las delicias de las delicias, los gozos de los gozos de la más completa beatitud en medida tal que ni el ojo del hombre ha podido nunca ver, ni el oído ha podido oír, ni el corazón ha podido alcanzar, mientras los hombres estén en su cuerpo frágil y corruptible. Por lo cual había delante de mí una especie de sello, por el que me fueron ocultados gozos más numerosos y todavía mucho más grandes que los precedentes que yo había visto. Y mi vista quedó deslumbrada. Y por el Espíritu viviente vi y entendí esto. Y de la luz viviente que he descrito, de nuevo oí una voz que me dijo: «Los gozos que ves son verdaderos, y son tal como los ves y también hay más».”

Hildegard von Bingen, Liber Vitæ Meritorum, VI XXXI



jueves, 17 de mayo de 2012

Benedicto XVI - La Ascensión



"El Jesús que se despide no va a alguna parte en un astro lejano. Él entra en la comunión de vida y poder con el Dios viviente, en la situación de superioridad de Dios sobre todo espacio. Por eso «no se ha marchado», sino que, en virtud del mismo poder de Dios, ahora está siempre presente junto a nosotros y por nosotros. En los discursos de despedida en el Evangelio de Juan, Jesús dice precisamente esto a sus discípulos: «Me voy y vuelvo a vuestro lado» (14,28). Aquí está sintetizada maravillosamente la peculiaridad del «irse» de Jesús, que es al mismo tiempo su «venir», y con eso queda explicado también el misterio acerca de la cruz, la resurrección y la ascensión. Su irse es precisamente así un venir, un nuevo modo de cercanía, de presencia permanente, que Juan pone también en relación con la «alegría», de la que antes hemos oído hablar en el Evangelio de Lucas [24,50-53].

Puesto que Jesús está junto al Padre, no está lejos, sino cerca de nosotros. Ahora ya no se encuentra en un solo lugar del mundo, como antes de la «ascensión»; con su poder que supera todo espacio, Él no está ahora en un solo sitio, sino que está presente al lado de todos, y todos lo pueden invocar en todo lugar y a lo largo de la historia."

Benedicto XVI  - Joseph Ratzinger